San Pedro de Atacama es uno de los destinos más fascinantes de Chile y de América del Sur. Ubicada en el corazón del desierto de Atacama, es una pequeña ciudad con una gran historia y un paisaje que parece de otro mundo. La región es famosa por sus increíbles escenarios naturales, su rica herencia cultural y su importancia arqueológica. Desde las impresionantes formaciones rocosas del Valle de la Luna hasta los exuberantes campos geotérmicos de los Géiseres del Tatio, San Pedro de Atacama ofrece una experiencia única para todo tipo de viajeros.

Llegando a San Pedro de Atacama

San Pedro de Atacama es accesible desde varias ciudades de Chile. La mayoría de los visitantes llega al Aeropuerto de Calama, a unos 100 km de distancia. Desde allí, puedes tomar un transfer o alquilar un coche para llegar a San Pedro. El viaje de Calama a San Pedro es una introducción al desierto, con paisajes impresionantes a lo largo del camino. Para quienes vienen desde Santiago, hay vuelos diarios a Calama, lo que hace que el viaje sea conveniente y rápido.

La Mejor Época para Visitar

San Pedro de Atacama puede visitarse durante todo el año, pero las condiciones climáticas varían. El verano (diciembre a febrero) es cálido, con temperaturas elevadas durante el día, mientras que las noches son más frescas. En invierno (junio a agosto), las temperaturas durante el día son templadas, pero las noches pueden ser muy frías, con heladas comunes. La primavera y el otoño son las épocas más equilibradas en términos de temperatura. La temporada de lluvias de verano, conocida como “invierno boliviano”, puede traer algunas tormentas ocasionales entre enero y febrero.